Rice dice que el acuerdo con Irak sobre la presencia de tropas de EEUU no es total, pero esta cerca

La secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, ha negado las informaciones de que ya se había logrado un acuerdo acerca de las tropas estadounidenses, aunque dijo que se está cerca y que espera enterarse por boca del primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, de si quedan más asuntos delicados por resolver.

Rice ha llegado inesperadamente a Bagdad esta mañana, donde ha asegurado que su país e Irak intentan alcanzar un acuerdo sobre la presencia en territorio iraquí de tropas estadounidenses más allá de este año.

"Es indudablemente cierto que los negociadores han llevado esto muy, muy cerca de finalizar con un acuerdo, pero no hay ninguna razón para pensar que ya hay un acuerdo o que va a haberlo hoy", ha afirmado Rice a los periodistas a bordo de su avión. "Pero tendré una oportunidad con el primer ministro para saber en verdad si hay alguna brecha que tenemos que cerrar en Washington", ha agregado.

La postura de la Casa Blanca

El largamente esperado acuerdo permitirá a las fuerzas estadounidenses permanecer en Irak más allá de fin de año, cuando expira el mandato del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. El mandato de la ONU para la presencia internacional fue aprobado tras la invasión liderada por Estados Unidos que derrocó a Sadam Husein en el 2003.

Funcionarios iraquíes dicen que el acuerdo está casi finalizado, y que les gustaría incluir en él "horizontes de tiempo" para que las fuerzas estadounidenses se retiren del país, mientras que la Casa Blanca sostiene que el arreglo aún no está completado.

Las autoridades locales han dicho que les gustaría ver que las fuerzas norteamericanas terminan con sus patrullas de rutina por las calles iraquíes para mediados del próximo año, y que las tropas de combate se retiran completamente para el 2010 o el 2011. Pero no está claro lo explícito que se escribirá eso en el acuerdo.

El plan de Obama

Un compromiso para retirar las tropas de combate en 2010 podría parecerse al plan ofrecido por el candidato presidencial demócrata Barack Obama, que desea una retirada para mediados del 2010. El presidente estadounidense, George W. Bush, y el candidato republicano, John McCain, dicen que las reducciones de tropas son posibles pero no desean comprometerse con un calendario firme.

Otros asuntos que aún deben resolverse incluyen la inmunidad de los soldados estadounidenses con respecto a las leyes iraquíes y el estatus de los prisioneros en manos norteamericanas.